La solución estructural a un proyecto arquitectónico determinado obviamente va a estar controlada por las acciones que son críticas o dominantes y por la respuesta o nivel de comportamiento que se espera del edificio. A ésta última nos referimos en la sección siguiente.
Las acciones críticas son aquellas que determinan por un lado el sistema estructural global del edificio, y por otro el diseño de cada uno de los elementos estructurales que lo componen.
Si se tratara de un edificio de hormigón armado desarrollado en altura, en zona de peligrosidad sísmica elevada, como es el caso que nos ocupa, seguramente la acción que domina la respuesta global y local será la excitación sísmica, la que habrá que combinar con las demandas gravitatorias para diseñar los elementos estructurales.
Lo importante en esta etapa del diseño es identificar las acciones críticas con sus posibles combinaciones. Convengamos que para el edificio en estudio, por ubicarse en zona de alta peligrosidad, las mayores demandas de resistencia y ductilidad estarán asociadas a un terremoto severo, y lo que hay que decidir ahora es qué nivel de respuesta se espera.